Martes 15 octubre. Novelda nos «sonaba» por su comercio del mármol y los clientes que cada uno visitaba. Lo curioso, que pocos conocíamos la riqueza urbana del art nouveau. su paso por el modernismo de principios del s.XX
Primera visita Santuario de Sta. Mª Magdalena. Una influencia manifiesta de Gaudí: sombra de la Sagrada Familia ó el Palacio Episcopal de Astorga. Por fuera, el mármol rugoso, la desnuda piedra, los volúmenes, son muestra de magnitud. Pero en su interior, la grandiosidad del órgano, único público en el mundo, sin metal, ni madera. Incluso sus tubos son todos de mármol El aire viaja por unas láminas grandes de mármol, conseguidas por destreza milagrosa con originales curvaturas, para que suenen a gloria, como Susi la guía nos demostró, por unos registros mecánicos de piezas musicales.
Muy cerca, paseamos y subimos al Castillo de la Mola, de finales del s. XII, con torre cuadrada, que dominaba una extensa zona. Cuando a finales del s.XIV, lo toman los cristianos, construyen una torre triangular, muy peculiar, por lo perfecto de su triangulo equilátero ¿Cuántas conocéis así construidas?
Ya en la ciudad, el paseo callejero y visita a la casa-museo modernista. !! no dejéis de visitarla!! Exhibe madera, metal, muebles, pinturas… conservadas desde el 1.903. La dueña lo encargó “sin límite “ en el presupuesto. Lorena, la guía, con toda la información, nos hizo gozar de las tres plantas de joya modernista.
Con prisa, porque en el Nou Cucut nos esperaba comida de las buenas, algunos nos metimos en el centro cultural Gómez-Tortosa, descartado como El Casino, por falta de tiempo. Novelda es mucho y el centenario del ilustrado y marino Jorge Juan merecen volver. El tlf 965 609 228 y Beatriz de Turismo os facilitaran el mejor conocimiento (podéis ir de parte de Calatayud)
Monovar y la Casa-Museo de Azorín inaugurado en 1.969, con muebles, biblioteca y documentos de José Martínez Ruiz, falleció en 1967 y, según Lorena la guía, uno de los valores de la generación del 98, junto a Pio Baroja y Ramiro de Maeztu.
Un feliz día, agradables visitas, precio, comida y compañía ¿la siguiente, dónde vamos?
Sylvia Boyero